martes, 28 de abril de 2009

Miradas



No me mires, que miran
que nos miramos,
y verán en tus ojos
que nos amamos.
No nos miremos, 
que cuando no nos miren
nos miraremos.


Luis de Góngora 

lunes, 20 de abril de 2009

Periódicos


Esta tarde he ido a mi taller de cerámica para adelantar trabajo. Como no era mi día ni mi hora, tuve que montar todo mi "espacio de creación" con esmaltes de cuerda seca, pinceles, azulejos, morteros y vasos en el aula de al lado. 
A las 5:30 comenzaba una clase de niños de 10 años. No eran más que siete, pero como bien dijo mi profe Marga "Esta clase hace tanto ruido como un circo!!". Les tocaba hacer unos bocetos de sus propias caras, para luego pintarlos en los platos para la futura exposicion fin de curso. Por si no sabían dibujarse, la profe les puso un espejo para que se mirasen.
Para que pudiesen dibujar cómodamente sobre las mesas de madera, muy sucias por el barro, la profe cogió de pintura unos periódicos antiguos. Es costumbre en el taller de pintura que cada alumno vaya llevando de vez en cuando los periódicos atrasados de su casa, así como tarros de mermelada, vasos de yogures...esenciales para mezclar colores. Recordé como hace años, cuando también iba al taller de pintura, me solía entretener leyendo por alto noticias del pasado. A veces semanas, otras veces años, me remontaba atrás en busca de nueva inspiracón. Quién sabe si no será ese el origen de mi curiosa obsesión-fascinación por el paso del tiempo...
Me sacó de entre mis pensamientos la voz de un niño leyendo el periódico que había caido en sus manos "La Señora Doña ... falleció el 1 de febrero en Avilés, tras haber recibido los Santos Sacramentos....". "El funeral por su eterno descanso se celebrará el Lunes..." le contestó otra voz aguda y risona. La profe y yo nos miramos perplejas: estaban leyendo las esquelas, con la misma frescura de quien lee  un tebeo. Hay que reconocer que al menos comparten con las viñetas de comic el formato de texto en un marco negro...
Desde luego a ningúna de esas personas que llamamos y se autodefinen como "adultos" se le ocurriría leer la sección funebre de un periódico en voz alta y mucho menos delante de más "adultos". Pero debe ser que cuando tu cabeza no levanta ni 1,5 metros del suelo todo se ve desde otra perspectiva.
No puede evitar un pensamiento: "Qué lejos parece la muerte cuando se es un niño..."

jueves, 9 de abril de 2009

El Síndrome de los veintitantos

También conocido como "La crisis del cuarto de vida"...

Te das cuenta de que cada vez es más difícil ver a tus amigos y coordinar horarios por diferentes cuestiones: trabajo, estudios, pareja, etc...

Pero también comienzas a dar cuenta de que, mientras algunos eran verdaderos amigos, otros no eran tan especiales después de todo. 

Ríes con más ganas, pero lloras con menos lágrimas  y con más dolor. Te rompen el corazón y te preguntas como esa persona que amaste tanto te pudo hacer tanto daño. 

O quizás te acuestas por las noches y te preguntas por qué no puedes conocer a alguien lo suficientemente interesante como para querer conocerlo mejor. 

Parece como si todos los que conoces ya llevan años de novios y algunos empiezan a casarse. Quizás tú también amas realmente a alguien, pero simplemente no estás seguro si te sientes preparado para comprometerte.

A veces te sientes genial e invencible, y otras... solo, con miedo y confundido. 

De repente tratas de aferrarte al pasado, pero te das cuenta de que el pasado cada vez se aleja más y que no hay otra opción que seguir avanzando. 

Te preocupas por el futuro, préstamos, dinero... y por hacer una vida para ti. Y si antes ganar la carrera parecía grandioso, ahora tan solo desearías estar compitiendo en ella.

Notas como el tiempo se escapa entre tus dedos, sin importar lo fuerte que aprietes tu puño, y una pregunta acecha tu mente constantemente... ¿Hacia dónde voy?